lunes, 20 de enero de 2014

LA MALA NOTICIA (1)

Hay maneras y maneras de dar noticias. Y hay maneras de que las malas no parezcan tan malas.
Queridos papá y mamá:
Desde que me vine a la academia he descuidado el escribiros y lamento no haberlo hecho antes. Ahora os pondré al corriente, pero antes sentaos. No leáis nada más, a menos que estéis sentados.
Bueno, pues me encuentro bien ahora. La fractura de cráneo y la conmoción cerebral que me produjo la caída al saltar desde la ventana de mi dormitorio, cuando éste se incendió, se han curado perfectamente. Pasé sólo quince días en el hospital, ya veo casi con normalidad y sólo me afecta el dolor de cabeza una vez al día. Por fortuna, el incendio en el dormitorio y mi salto por la ventana fueron presenciados por un empleado de la gasolinera cercana, que avisó a los bomberos y a la ambulancia. Después vino a visitarme al hospital y como yo no tenía sitio donde vivir, a causa del incendio, fue tan amable que me invitó a compartir su vivienda. Se trata de un sótano, pero es muy cuco. Él es un muchacho excelente y nos enamoramos como locos, por lo que pensamos casarnos. Todavía no sabemos la fecha exacta, pero será antes de que se note mi embarazo.
Sí papás, estoy embarazada. Me consta lo mucho que os complacerá ser abuelos y estoy segura que recibiréis bien al bebé, dándole el mismo cariño, afecto y cuidados que tuvisteis conmigo cuando era pequeña.
La causa del retraso en nuestra boda se debe a una ligera infección que padece mi novio la cual nos ha impedido pasar las pruebas hematológicas prematrimoniales pues yo, descuidadamente, me he contagiado de él.
Estoy segura de que lo recibiréis en nuestra familia con los brazos abiertos. Aunque no es muy educado, es muy cariñoso y ambicioso. Su raza y religión son distintas de la nuestra, pero sé que vuestra tolerancia no os permitirá enfadaros por esto.
Ahora que ya estáis al corriente de todo, quiero deciros que no se incendió mi dormitorio, no tuve fractura ni conmoción cerebral ni fui al hospital, no estoy embarazada, no tengo novio, no sufro ninguna infección y no hay ningún muchacho en mi vida. Sin embargo, he sacado un suspenso en Historia y otro en Ciencias y quiero que veáis estas notas en su perspectiva adecuada.
Vuestra hija que os quiere.

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