martes, 31 de mayo de 2016

LO LÓGICO Y LO LEGAL

Un joven estudiante de derecho, habiendo suspendido el examen final, interpela a su severo catedrático, célebre por su aguda mente jurídica: Profesor, ¿entiende Vd. realmente todo lo referente a su asignatura?
Creo que sí, de otro modo no sería catedrático, ¿no le parece?
Muy bien. Entonces me gustaría formularle una pregunta. Si puede darme la respuesta correcta, aceptaré gustosamente su suspenso. De lo contrario, tendrá que darme matrícula de honor.
De acuerdo, ¿cuál es su pregunta?
Muy sencillo: ¿qué es legal pero no lógico, lógico pero no legal y ni lógico ni legal?
Por mucho que el profesor se estruja su célebre mente jurídica, no consigue dar con la respuesta correcta. Así que se da por vencido y cambia el suspenso por una matrícula.
Durante el resto del día, el profesor sigue devanándose los sesos con la maldita pregunta.
Al día siguiente convoca a los estudiantes más brillantes de su clase y les anuncia que tiene una pregunta muy difícil: ¿qué es legal pero no lógico, lógico pero no legal y ni lógico ni legal?
Para su sorpresa y vergüenza, todos los estudiantes levantan la mano.
Está bien. Contesten.
Es muy fácil profesor, verá: Vd. tiene 60 años y está casado con una mujer de 25, lo cual es legal, pero no lógico. Su mujer tiene un amante de 22 años, lo cual es lógico, pero no legal. Y el amante de su mujer ha suspendido el examen y Vd. le acaba de dar ma­trícula de honor, lo cual no es ni lógico ni legal.

martes, 3 de mayo de 2016

CRISTIANA SEPULTURA

Viajaba en un autobús, a gastos pagados y cobrando dietas, una comisión de diputados para analizar los problemas agrarios.
En una curva el conductor del autobús perdió el control y chocaron contra algunas rocas y árboles.
Cuando llegan al lugar de los hechos, ambulancias, Guardia Civil, Ejército, Bomberos y Protección Civil, para auxiliar a los lesionados, no había ninguna persona entre los restos del autobús.
Empiezan las investigaciones y la Guardia Civil se da cuenta que cerca del accidente hay una casa. Van allí a preguntar y sale un campesino a recibirlos y: Oiga, ¿vio usted a los políticos que se accidentaron?
Sí, sí los vi. Ya les di cristiana sepultura.
¿No me diga que estaban todos muertos?
Bueno, algunos decían que no, pero ya sabe usted como mienten estos tipejos.