Así nace una frase hecha.

Un hombre fue llevado de urgencias a un hospital administrado por monjas, en el que le operaron del corazón. 

Después de la operación, despertó y una monjita que estaba a su lado: Señor Pérez, la operación fue un éxito, sin embargo, necesitamos saber cómo piensa pagar la cuenta del hospital, ¿tiene Vd. algún seguro médico? 

No.

¿Puede pagar en efectivo?

Me temo que no, hermana.

Entonces, ¿tiene Vd. parientes cercanos?

Sólo mi hermana, pero es una monja solterona sin un céntimo.

Disculpe que le corrija, las monjas no somos solteronas; estamos casadas con Dios.

¡Magnífico! Por favor, envíele la cuenta a mi cuñado.
Y así nació el: ¡Que Dios te lo pague!

MALENTENDIDO

Un tipo al entrar en un bar ve en la barra una jarra enorme, llena hasta arriba de billetes de 10 €. Calcula que habrá por lo menos diez mil euros. 
   ·   Camarero, ¿qué significa esta jarra llena de dinero?
   ·   Es de una apuesta, Vd. mete un billete de 10 €, y si pasa tres pruebas, se lleva todo ese dinero y un BMW nuevo. 
   ·   ¿Cuáles son esas tres pruebas?
   ·   Primero meta el billete, son las reglas.
Tras pensarlo un rato, se decide y mete el billete de 10 € en la jarra. 
   ·   Vale, primero tiene que beberse una botella de tequila, sin hacer un sólo gesto, y en menos de un minuto.
Después tiene que sacarle con sus manos y sin guantes, la muela que tiene picada y le duele al pit bull que está atado en el patio de atrás.
Por último, tiene que desflorar a una viejecita de 90 años que es virgen y está en el piso de arriba. 
   ·   Vale, ¿donde está el tequila? 
Coge la botella con las dos manos y se la bebe todo lo rápido que puede, no hace ni un gesto y tarda sólo 58 segundos.
A continuación sale, tambaleándose, al patio donde está atado el pit bull.
Enseguida, la gente que está en el bar oye gritos horribles, gruñidos, chillidos, gemidos, golpes, los clásicos ruidos de una pelea considerable y de repente, el silencio otra vez.
Todos creen que el hombre está muerto, pero de repente, vuelve a entrar en el bar, todavía tambaleándose, con la ropa hecha jirones y lleno de arañazos, mordiscos y heridas, cubierto de sangre por todas partes y con la voz pastosa de un borracho dice: 
   ·   Venga, ¿dónde está esa viejecita con la muela picada?

ILUSTRANDO LA HOMILÍA

Un cura, decide mostrar ejemplos concretos para ilustrar su homilía dominical.

Para ello, pone 4 lombrices en 4 frascos: 

·    La primera en un frasco de alcohol. 

·    La segunda en un frasco lleno de humo de cigarrillo. 

·    La tercera en un frasco lleno de esperma. 

   ·    La última, en un frasco lleno de agua pura y cristalina.

Al concluir su homilía, en la que hablaba de los pecados, muestra los frascos. 

·    La lombriz que estaba en el alcohol estaba muerta. 

·    La que estaba en el frasco lleno de humo de cigarrillo estaba muerta. 

·    La que estaba en el frasco lleno de esperma, también estaba muerta. 

   ·    La última que estaba en agua pura y cristalina estaba bien viva.

Entonces le pregunta a la asamblea: “¿Qué enseñanza se puede obtener de esta demostración?” 

En el fondo del templo se oye una voz de una viejecita que dice: “Mientras bebamos, fumemos y hagamos el amor, no tendremos lombrices”.