lunes, 4 de mayo de 2015

EL BANQUERO

Un famoso banquero, yendo en su limusina, vio a dos hombres a la orilla de la carretera comiendo césped.
Preocupado, ordenó a su chofer detenerse y bajó a investigar.
Banquero: ¿Por qué están Vds. Comiéndose el césped?
Hombre 1: No tenemos dinero para comida, por eso tenemos que comer césped.
Banquero: Bueno, entonces vengan a mi casa que yo los alimentaré.
Hombre 1: Gracias, pero tengo esposa y dos hijos conmigo. Están allí, junto al árbol.
Banquero: Que vengan también.
(Volviéndose al otro pobre hombre)
Banquero: Vd. también puede venir.
Hombre 2: Pero, señor, yo también tengo esposa y seis hijos conmigo.
Banquero: Pues que vengan también.
Entraron todos en el enorme y lujoso coche y de camino:
Hombre 1: Es usted muy bueno. Muchas gracias por llevarnos a todos.
Banquero: Hombre, no le dé vergüenza, soy muy feliz de hacerlo. Les va a encantar mi casa, el césped está como de veinte centímetros de alto.
Moraleja: Cuando crea que un banquero le está ayudando, piénselo dos veces.

No hay comentarios:

Publicar un comentario