En una tarde nublada y
fría, dos niños patinaban sin preocupación sobre una laguna congelada. De
repente el hielo se rompió, y uno de ellos cayó al agua. El otro agarro una
piedra y comenzó a golpear el hielo con todas sus fuerzas, hasta que logró romperlo
y así salvar a su amigo.
Cuando
llegaron los bomberos y vieron lo que había sucedido, se preguntaron: ¿Cómo lo hizo? El
hielo está muy grueso, es imposible que haya podido romperlo con esa piedra y
sus manos tan pequeñas.
En ese
instante apareció un abuelo y, con una sonrisa, dijo: Yo sé cómo lo hizo.
¿Cómo?
No había nadie a su alrededor
para decirle que no podía hacerlo.
Si lo puedes imaginar, lo puedes lograr. (Einstein)
No hay comentarios:
Publicar un comentario